Y un día cumplí 24 meses...
... que es como decir que cumplí 1 año y 12 meses. Pero... ¡pará! ¡Eso significa que cumplí 2 años!
¿Ya 2 años? ¡Mirá vos! El tiempo pasa volando cuando uno la pasa bien.
El día comenzó con el despertar redulce de mi Mamá. Enseguida me dieron el mejor regalo de todos: un súper autito como el de Los Picapiedras, de esos sin pedales.
Luego de un largo desayuno, nos cambiamos y fuimos a un pelotero de la calle Esteban de Luca, donde me festejaron mi cumple. Por suerte, vino toda mi familia: mis abuelos -que hicieron las pizzas y las tortas-, mis tíos, mis primos, mis padrinos y mis amigos, que no se cansaron de darme un montón de besotes y muchos regalitos.
Por supuesto que la pasé rebién, aunque a eso de ser anfitrión todavía no le tomé del todo la mano.
... que es como decir que cumplí 1 año y 12 meses. Pero... ¡pará! ¡Eso significa que cumplí 2 años!
¿Ya 2 años? ¡Mirá vos! El tiempo pasa volando cuando uno la pasa bien.
El día comenzó con el despertar redulce de mi Mamá. Enseguida me dieron el mejor regalo de todos: un súper autito como el de Los Picapiedras, de esos sin pedales.
Luego de un largo desayuno, nos cambiamos y fuimos a un pelotero de la calle Esteban de Luca, donde me festejaron mi cumple. Por suerte, vino toda mi familia: mis abuelos -que hicieron las pizzas y las tortas-, mis tíos, mis primos, mis padrinos y mis amigos, que no se cansaron de darme un montón de besotes y muchos regalitos.
Por supuesto que la pasé rebién, aunque a eso de ser anfitrión todavía no le tomé del todo la mano.