La madre de todas las malas noticias

¿?/12/07
No tengo fecha precisa -aunque promedia diciembre- ni la imagen corresponde a la situación que les comentaré, pero es bastante ilustrativa de lo que sentía.
¿Se acuerdan de que hace varios meses que vengo notando que hay algo diferente, relacionado con Mamá? ¿Y que su panzota se empezó a hacer más grandota...?
Bueno, ya está, se acabaron la incertidumbre y la angustia. En estos días -en realidad, a la noche-, no sé a título de qué, mis Papis me hicieron sentar para contarme algo.
Uh, cuando Papá viene con eso de charlar, me agarra un escalofrío que mejor no les cuento. Por suerte, la novedad fue directa al corazón; casi sin preámbulos ni rodeos.
Vas a tener un hermanito, anunció y una mueca parecida a una sonrisa fue lo único que respondí. De ahí en más, el silencio. ¿Para qué? ¿Para que me digan lo lindo que será tener a alguien con quien jugar? ¿Que voy a hacer el hermano mayor, la nueva autoridad..?
No, loco, se pudrió todo.
La charla duró algunos segundos más, pero les mentiría si recuerdo algo. Lo único que sé es que pensaba -y pienso- que...
No puede ser, no puede ser... ¡No puede ser!